#1: El Choclo de Oro

—Esto es una falta venga de donde venga… ¿Qué es lo que no me estas contado Virgilio?

—No sé que será Padre, se lo digo en serio…— Volvió a balbucear— pero parece que alguien intentan entrar…

El joven acólito caminaba tácito, intrigado de la forma en la que su iniciación como monaguillo había sido interrumpida. Y es que Villasante, al igual que el convento de Santo Domingo tenían una historia no convencional.

Aquella iglesia católica yacía sobre los cimientos de una construcción inca, como una forma de usurpación religiosa que representaba la victoria y el dominio del Vaticano sobre el paganismo indígena. Esto podía ser corroborado por el metro y medio de granito que soportaba en varias partes a la moderna iglesia. El Qoricancha, como lo llamaban los antiguos peruanos, significaba el “Templo de Oro” y fue un centro religioso importante de adoración solar. Ahora, albergando treinta y cuatro católicos, era el remanente de lo que fue una civilización antigua.

—¿Ingresar? ¿De que forma ingresarían en la cripta? —Refunfuñó el sacerdote sintiendose frustrado.

Seguir caminando